Argentina-Uruguay: Botnia protagoniza otro episodio de contaminación y la CARU impide tomar muestras

may 4, 2015
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Enviado por: Troposfera
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Gualeguaychú.

Una nube tóxica de UPM Botnia afectó ayer alrededor de las 14:30 a varios de los empleados y funcionarios del puesto de Migraciones y Aduana, incluso muchos de ellos debieron continuar sus tareas utilizando barbijos.

Sin embargo, cuando personal del Plan de Vigilancia Ambiental de la Municipalidad ayer intentó tomar una muestra de aire, la delegación argentina ante la Comisión Administradora del Río Uruguay (Dacaru) se lo impidió, dando así una cobertura de impunidad a la pastera.

El personal del Plan de Vigilancia, junto con personal de la Comisión Nacional de Energía Atómica solamente pudieron actuar –gracias a la amabilidad de Gendarmería Nacional- en la cabecera Oeste del puente internacional. “Esto es ridículo, porque esta muestra no sirve de mucho” razonaron quienes tenían que tomar la muestra.

De todos modos, fue un hecho inocultable para la Caru y para su protegida UPM Botnia, que la mayoría de los empleados y funcionarios del puesto de Aduana y Migraciones padecieron malestar físico a raíz de la una nube tóxica que provenía de la planta de UPM-Botnia.

Como es habitual en estos casos, no hubo información oficial siquiera para tranquilizar a la población si se estaba ante una situación inocua o no para la salud. Un desamparo absoluto, total que sólo tiene como objetivo generar impunidad para la pastera y desprotección para los ciudadanos.

Náuseas, vómitos, irritaciones en las mucosas fueron algunos de los padecimientos que sufrieron los trabajadores en el puente, muchos de ellos incluso debieron ser asistidos por personal médico.

La Caru guardó ante estos hechos un siniestro silencio, comparable al que esgrimió la propia planta. Y como ocurre siempre en estos casos donde el acceso a la información es un permanente escollo, comenzaron a correr distintas versiones: que hubo una explosión en una caldera, que el problema se suscitó en el tablero principal de la planta y por eso no se pudieron procesar correctamente los gases. Lo único oficial fue: impedir al Plan de Vigilancia tomar muestras en el lugar donde se vivieron las intoxicaciones y el ya siniestro silencio de protección a UPM Botnia por parte de la Caru, la máxima autoridad en esa zona.

Con el obstáculo de ayer, ya son dos las situaciones donde se le impide al personal de Vigilancia Ambiental tomar muestras. “La anterior fue en febrero, cuando a un miembro nuestro además de impedirle tomar muestras se lo detuvo en la zona de los peajes del puente”, recordó la directora de Ambiente Municipal, Noelia Indart. “Esa vez tuvimos miedo, porque se lo había retenido y ninguna autoridad se identificaba. Ahora (por ayer) directamente de la Caru se nos ordenó que no pasemos el puente”, recalcó Indart.

Las emanaciones tóxicas son ya recurrentes. Incluso en el Libro de Novedades de la Aduana están registrados varios hechos similares, pero como ocurre siempre ninguna autoridad se hace cargo de nada. ¿Hasta cuándo y para qué proteger a UPM Botnia?

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